Los niños que crecen con un perro o en el entorno de una familia numerosa ( tres personas o más) pueden tener cierta protección frente a la enfermedad de Crohn a lo largo de su vida, según un nuevo estudio.
Un nuevo estudio, presentado en la Semana de las Enfermedades Digestivas (DDW por sus siglas en inglés) durante el pasado mes de mayo de 2022 en la ciudad de San Diego, ha investigado y evaluado los factores ambientales que están asociados al inicio o desarrollo de la enfermedad de Crohn.
Este nuevo estudio incluyó a más de 4 mil familiares sanos de primer grado de personas diagnosticadas con enfermedad de Crohn. Se les analizaron muestras de orina, sangre y heces y se realizaron encuestas sobre exposiciones ambientales en diferentes etapas de la vida. Los investigadores realizaron un promedio de 5,6 años de seguimiento, periodo durante el que se diagnosticaron a 86 personas la enfermedad de Crohn.
Según los investigadores de este estudio, los niños que viven con un perro entre los 5 a 15 años presentaron menos de probabilidades de desarrollar la enfermedad de Crohn. Y, por otro lado, aquellos que vivieron en un entorno de familia numerosa (3 o más miembros) también pueden reducir el riesgo de tener esta Enfermedad Inflamatoria Crónica.
Los investigadores de este estudio también estudiaron otros factores ambientales, tales como tamaño de la familia, número de baños en la casa, vivir en una granja, beber leche sin pasteurizar o agua de pozo, crecer con un gato, pero no encontraron un vínculo significativo con la posibilidad de desarrollar la enfermedad de Crohn.
También encontraron un aumento ligero del riesgo el hecho de tener un hermano con Crohn y convivir con un pájaro. Sin embargo fueron pocas las personas en este estudio que tuvieran un ave como mascota.
Vivir con un perro desde etapas tempranas de la vida pudiera significar una mayor exposición a diferentes microbios que hace que aumente la fortaleza del sistema inmunitario para afrontar retos posteriormente.
“Este estudio muestra que el simple hecho de vivir con un perro afecta a la composición del microbioma intestinal, lo que puede tener un impacto en la respuesta inmunitaria más adelante en la vida” según el Dr. Tupin y sus colaboradores . De todas formas, este estudio debe replicarse y validarse según dijo el propio investigador.
Williams Turpin, PhD, director de proyectos, Hospital Mount Sinai, Toronto. Digestive Disease Week. «Living with dogs (but not cats) as a toddler might protect against Crohn’s disease: New study suggests that growing up with a large family can also lower risk of inflammatory bowel disease.» ScienceDaily. ScienceDaily, 24 May 2022. <www.sciencedaily.com/releases/2022/05/220524124541.htm>