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Los alimentos fermentados se han utilizado durante siglos en varias partes del mundo. El término “alimentos fermentados” se refiere a un conjunto de alimentos que sufren diversas formas de descomposición química inducida por microorganismos probióticos. Estos alimentos son ricos en nutrientes y se producen de forma natural utilizando diversas herramientas biológicas como bacterias y hongos. Durante la fermentación, las bacterias o los hongos generan energía y aumentan su número en los ingredientes alimentarios.
La fermentación de alimentos comestibles se utilizó ya en culturas antiguas para la conservación de los alimentos y almacenamiento durante un largo período de tiempo con los valores nutricionales deseados o mejorados.
Algunos de los beneficios para la salud de los alimentos fermentados que contienen probióticos incluyen mejorar el microbioma intestinal, mejorar la salud intestinal y el sistema inmunológico, incluso reducir el riesgo de diferentes enfermedades inflamatorias y ciertos tipos de cáncer.
Existe la evidencia experimental de que las verduras fermentadas o sus derivados, incluido el repollo en conserva como el kimchi, el chucrut y los alimentos fermentados a base de soja pueden tratar y prevenir potencialmente las enfermedades inflamatorias. Sin embargo, los estudios clínicos siguen siendo escasos para muchos alimentos.
Una nueva revisión de la literatura científica se centra en la evaluación de la eficacia de varios alimentos o bebidas fermentadas utilizados durante siglos frente a la inflamación, la artritis y el estrés oxidativo.
- Kombucha
La Kombucha probablemente se originó en Manchuria y está hecha por fermentación de varias bacterias y levaduras. Es un té verde o negro dulce elaborado con cultivos fermentados de microorganismos simbióticos.
La composición química de la kombucha depende de los ingredientes utilizados durante su proceso de fermentación, como la kombucha derivada del té blanco, verde, negro y rojo.
Una revisión reciente mostró que la kombucha posee propiedades antimicrobianas contra un amplio espectro de bacterias y hongos. Tomar kombucha promueve una mejora en el microbioma intestinal que puede tener efectos antiinflamatorios.
- Cúrcuma fermentada
La cúrcuma se cultiva ampliamente en India, China y otros países del sudeste asiático. La curcumina, su componente principal es un compuesto antioxidante y antiinflamatorio que ha demostrado ayuda en artrosis, diabetes mellitus tipo 2 y dislipemias (trastornos de los niveles de lípidos o grasas en la sangre como el colesterol).
La utilidad del extracto de cúrcuma en el tratamiento de la Artritis está respaldada por investigaciones científicas, pero a altas dosis (1000mg/día de curcumina) por su efecto antiinflamatorio. Sin embargo la curcumina es casi insoluble en agua, lo que reduce su biodisponibilidad.
Por otro lado, la toxicidad de la cúrcuma sin fermentar es proporcional a su concentración.
- Té fermentado
El té es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo. Todas las variedades del té, el té verde, té blanco, té amarillo, te negro, te rojo, etc. provienen de las hojas y brotes de la planta del té (Camellia sinensis). Esta nomenclatura es consecuencia de la clasificación tradicional del té según el grado de fermentación y cada una de ellas tiene diferentes propiedades y beneficios para la salud.
El té oscuro es el té más fermentado. Está ganando popularidad debido a sus beneficios para la salud, incluida la protección contra la hipertensión, las enfermedades cardiovasculares, la Artritis Reumatoide, la reducción del peso y el control intestinal y cambios en la flora intestinal.
- Probióticos
Los probióticos son microbios que fomentan el desarrollo de otros microorganismos. Se definen como alimentos, preparaciones o suplementos nutricionales que promueven la salud humana y animal. Su función es hacer que el microbioma intestinal humano vuelva a su normalidad después de una dieta deficiente, una enfermedad o en el proceso de curación.
Los probióticos están disponibles en forma de cápsulas, píldoras y también en alimentos fermentados.
La evidencia actual muestra que un trastorno en la composición del microbioma intestinal puede contribuir a la enfermedad de personas fisiológicamente vulnerables.
La suplementación con probióticos en pacientes con Artritis Reumatoide tiene un beneficio general, al menos a corto plazo.
- Chucrut
La preparación del chucrut se remonta al siglo IV antes de Cristo y es uno de los métodos más tradicionales de conservación de la col. Es col fermentada y se consume más en Europa central y oriental que el Kimchi asiático
- Kimchi
El Kimchi es verdura fermentada que se consume en Corea y es popular en todo el este asiático. A diferencia del chucrut europeo, el kimchi incorpora otros ingredientes como el brócoli, nabo, zanahoria, rabanito, cebolla, pepino, manzana.
- Alimentos fermentados a base de Soja
Los productos de la soja han despertado interés en los últimos años como un arsenal contra las condiciones inflamatorias. La soja es una leguminosa típica en los hogares asiáticos y constituye la base de diversas bebidas y platos ricos en proteínas.
Varios estudios coinciden en que los productos de soja fermentada pueden ejercer efectos antiinflamatorios en varios sistemas fisiológicos.
A pesar de la creciente evidencia sobre los beneficios de los alimentos fermentados, incluidos los efectos antiinflamatorios, existe preocupación sobre su seguridad en relación al consumo frecuente de estos alimentos.
Niveles elevados de diferentes compuestos como la tiramina y la histamina, que se producen durante el proceso de fermentación del chucrut, pueden estar relacionados con reacciones alérgicas, urticaria, etc. Por otro lado, en el caso de la fermentación del kimchi se requiere grandes cantidades de sal, además del aumento de otros productos con posibles efectos perjudiciales para la salud humana en el caso de consumirlos en grandes cantidades.
En resumen, los alimentos fermentados como el kimchi, el chucrut, los productos de soja y las bebidas como los tés fermentados están llamando la atención como fuente de compuestos antiinflamatorios naturales.
Estos productos deben ser considerados alimentos funcionales ya que aportan efectos tanto nutricionales como terapéuticos frente a diversos trastornos inflamatorios crónicos. Sin embargo, existe una escasez de datos clínicos, lo que destaca la necesidad de una investigación con ensayos clínicos controlados para evaluar de forma sistemática los efectos potenciales de estos alimentos fermentados.
Antes de tomar cualquier suplemento dietético o complemento, por favor ¡Consulta con tu médico!
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ARTRITIS REUMATOIDE
