La enfermedad de Parkinson puede afectar a muchos aspectos de la vida, dando lugar a síntomas posiblemente inesperados, como el cansancio y somnolencia durante el día que dificultan la concentración y las actividades cotidianas, disminuyendo la calidad de vida de estas personas.

Un estudio recientemente publicado investiga los factores de riesgo de la somnolencia diurna excesiva. En este estudio participaron más de 400 personas con Parkinson durante un periodo de seguimiento de 5 años.

La Academia Americana de Medicina del Sueño define como somnolecia diurna excesiva como la incapacidad para mantener la vigilia o estado de alerta durante el día. El sueño se produce involuntariamente o en momentos inapropiados casi a diario durante al menos tres meses.

La somnolencia diurna excesiva es un hecho común en las personas con Parkinson, puede afectar a más de un 50% de los pacientes. Este síntoma aumenta la carga de la enfermedad afectando a la calidad de vida.

Los resultados de este estudio muestran que la somnolencia diurna excesiva es una característica no estable, es decir que aparece y desaparece a lo largo del tiempo. Sin embargo, a medida que pasan los años aumenta el número de personas con Parkinson que presentan este síntoma y se hace cada vez más persistente.

En el grupo de pacientes de Parkinson que participaron en este estudio, un 69% presentaron somnolencia diurna excesiva en algún momento durante el período de seguimiento y casi el 50% de los que no presentaban este síntoma al inicio del estudio lo comunicaron a lo largo del período de seguimiento.

La causa de la aparición de este síntoma se cree que es la afectación de la zona del cerebro que controla el sueño y la vigilia.

Las personas con Parkinson con frecuencia tienen dificultades para un buen descanso nocturno, tales como: problemas para conciliar el sueño por la noche, despertarse con frecuencia  bien por sueños vividos o pesadillas o por la necesidad de levantarse al baño para orinar, apnea del sueño o respiración interrumpida, depresión, calambres en las piernas, etc. Las alteraciones del sueño forman parte de la naturaleza impredecible de la enfermedad de Parkinson y son un problema frecuente que habitualmente no se les da importancia.

Si no se descansa bien y lo suficiente durante la noche, esto da lugar al cansancio diurno, somnolencia o incluso dormirse en situaciones no propias.

El tratamiento dopaminérgico juega un papel muy importante en este síntoma. La somnolencia diurna excesiva es menor en aquellas personas con Parkinson que están bajo tratamiento con levodopa que aquellos que siguen tratamiento con agonistas doparminérgicos.

Los factores que contribuyen a la aparición de la somnolecia diurna excesiva son: sexo masculino, la dosis de agonistas de la dopamina, las alteraciones de la función cognitiva ( aquellas que permiten organizarnos, razonar y controlar nuestros actos voluntarios) la presencia de alucinaciones, las alteraciones del sueño nocturno y la evolución de la enfermedad.

No tomes medicación por tu cuenta para mejorar tu calidad de sueño. Si tienes problemas para descansar durante la noche o si durante el día te notas muy cansado y estás somnoliento ¡Habla con tu médico!

Zhu K et al.  Course and risk factors for excessive daytime sleepiness in Parkinson’s disease. Parkinsonism Relat Disord. 2016  in press http://goo.gl/ROccYc