Una nueva revisión ofrece información sobre las diferencias entre la Colitis Ulcerosa de los adultos jóvenes o adultos mayores(60 años o más).
Cada día están aumentando más el número de personas mayores (entre 60 años o más) que reciben el diagnóstico de Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII).
Una gran base de datos estadounidense en la que incluye aproximadamente 56 millones de ciudadanos informó un aumento de la incidencia en el período 2005 a 2015 (10 años), colocando a la Colitis Ulcerosa de inicio sobre los 60 años o más en el pico de todos los diagnósticos de EII. Lo mismo sucede con registros de otros países.
Estos datos dejan claro que las personas mayores con Colitis Ulcerosa representan un reto para el cuidado de la salud de hoy y de un futuro muy cercano. Debemos tener en cuenta que con el aumento de la edad y, por lo tanto, el aumento de la presencia de otras enfermedades y otros tratamientos médicos y quirúrgicos no relacionados con la EII, la aparición de una Colitis Ulcerosa de inicio tardío y su tratamiento son un desafío importante.
Una nueva revisión de la literatura científica se centra en proporcionar información sobre las diferencias de la Colitis Ulcerosa de inicio en la edad adulta en pacientes mayores en comparación con el comportamiento de esta enfermedad en adultos más jóvenes en relación a la extensión, riesgo de progresión, respuesta a los tratamientos, etc.
Los investigadores de esta revisión concluyen que el inicio de la Colitis Ulcerosa en una edad avanzada es cada vez más frecuente superando la incidencia o número de casos en adultos y junto con los pacientes con enfermedad de larga duración, por lo tanto los mayores de 60 años representan una proporción constante de personas con Colitis Ulcerosa.
La enfermedad de aparición tardía parece tener una presentación comparable con la que se inicia en edad adulta, pero algunos indicadores apuntan a un curso más benigno de la enfermedad, especialmente en relación a la necesidad del uso de fármacos inmunosupresores o biológicos y la extensión, así como en cuanto a la aparición menos frecuente de manifestaciones extra-intestinales en la Colitis Ulcerosa de inicio tardío. Estos factores, aparentemente favorables, se ven superados por los riesgos relacionados con la edad como aparición de eventos tromboembólicos, neoplasias malignas, infecciones etc.
Está justificado la realización de más estudios en este tipo de población con fármacos biológicos más nuevos o introducidos más recientemente, tanto en aquellas personas con Colitis Ulcerosa de larga duración de inicio temprano como de inicio tardío.
En resumen el número de pacientes mayores con Colitis Ulcerosa aumenta constantemente; los tratamientos con inmunomoduladores y terapias biológicas pueden verse afectados ya que esta población puede presentar más riesgo de efectos secundarios, incluidas infecciones y/o tumores malignos. Los tratamientos biológicos más recientes parecen ser seguros, pero se necesita mayor investigación en esta población.