La Colitis Ulcerosa es una Enfermedad Inflamatoria Intestinal Crónica (EII) de origen desconocido a día de hoy. Tiene un curso natural impredecible y caracterizado por períodos de enfermedad activa (recaídas o brotes) alternándose con períodos de “silencio” de la enfermedad o ausencia de síntomas.
La presencia de Colitis Ulcerosa contribuye a un deterioro de la calidad de vida relacionada con la salud. De hecho, los pacientes con Colitis Ulcerosa informan de peor calidad de vida que la población general o individuos sin esta enfermedad. La calidad de vida relacionada con la salud se define como el bienestar del paciente que se ve afectado por la presencia de una enfermedad o su tratamiento, tal y como lo percibe el paciente.
Un nuevo estudio sueco investiga la calidad de vida relacionada con la salud en pacientes con Colitis Ulcerosa en remisión tras 10 años de evolución de la enfermedad en comparación con la calidad de vida en la población general. Y, de forma secundaria, identificar factores predictores de la calidad de vida de los pacientes con Colitis Ulcerosa de larga evolución y en remisión.
Los resultados de este estudio sugieren que la calidad de vida relacionada con la salud en pacientes con Colitis Ulcerosa de larga evolución y en remisión es comparable con la calidad de vida de la población general. Sin embargo, ha encontrado que la actividad de la enfermedad precedente (al menos moderada), el tratamiento con corticoides y la incapacidad laboral debido a la Colitis Ulcerosa durante el año anterior tienen un impacto en diferentes aspectos de la calidad de vida de salud física. Por el contrario, la calidad de vida de salud mental estuvo determinada principalmente por factores psicológicos, tales como la angustia y la fatiga.
Sabemos que la Colitis Ulcerosa es una enfermedad crónica que, a día de hoy, no tiene cura. Por otro lado, aunque la mayoría de los aspectos de la calidad de vida en pacientes con Colitis Ulcerosa de larga duración en remisión es comparable a la de la población general, estos pacientes experimentan cargas en su funcionamiento y en el bienestar físico y mental.
Factores como la angustia psicológica, la fatiga y los síntomas gastrointestinales persistentes a menudo no se reconocen y se tratan de forma subóptima ya que generalmente los profesionales de la salud se centran principalmente en el manejo adecuado de la actividad de la enfermedad relacionada con la inflamación. Sin embargo, los resultados de este estudio subrayan la importancia de evaluar también la angustia, la fatiga y los síntomas gastrointestinales persistentes, ya que estos factores contribuyen al bienestar del paciente y son potencialmente modificables.
En conclusión la calidad de vida en la Colitis Ulcerosa de larga evolución y en remisión es comparable con la de la población general. Sin embargo, la actividad previa de la enfermedad (moderada o grave), los síntomas gastrointestinales persistentes, la fatiga y la angustia psicológica se asocian con una calidad de vida más baja entre estos pacientes.
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