El pronóstico o predicción en las enfermedades reumáticas inflamatorias crónicas ha mejorado mucho durante las últimas décadas, principalmente debido a un inicio temprano del tratamiento con Fármacos Antirreumáticos Modificadores de la Enfermedad (FAME y un control sostenido de la actividad de la enfermedad. El uso óptimo de estos fármacos, especialmente los fármacos biológicos, reduce la actividad de la enfermedad, la progresión radiológica y mejora los resultados en relación a la función articular a largo plazo, especialmente en la Artritis Reumatoide.
La falta de un correcto cumplimiento de la medicación recetada en el ámbito del tratamiento biológico de las enfermedades reumáticas inflamatorias crónicas podría estar relacionado con un escaso conocimiento de los pacientes sobre estos fármacos y su manejo.
La vía de administración de los tratamientos biológicos utilizados en reumatología ha cambiado en los últimos años, con un uso creciente de la vía subcutánea. El cambio de la vía intravenosa a la vía subcutánea puede llevar a consecuencias en términos de adherencia ya que la diferencia entre ambas vías de administración es que las inyecciones subcutáneas auto-administradas no tienen ningún control por parte del equipo de reumatología, en comparación con la intravenosa.
La adherencia a la medicación se puede definir como “el grado en que el comportamiento de una persona (tomar la medicación, seguir una dieta y/o hacer cambios en el estilo de vida) se corresponde con las recomendaciones acordadas con el profesional sanitario”.
El beneficio completo de las intervenciones farmacológicas, y de la terapia biológica en particular, solo se puede lograr si los pacientes siguen de cerca los regímenes farmacológicos pautados por su médico.
En pacientes con enfermedades crónicas la adherencia suele ser baja o deficiente, lo que puede afectar a la eficacia del tratamiento y comprometer los resultados. Por lo tanto, mejorar la adherencia al tratamiento podría mejorar sustancialmente la eficacia y reducir gasto sanitario. Para optimizar la adherencia a los medicamentos, cualquier prescripción de antirreumáticos, el tratamiento debe ir acompañado de información y educación del paciente.
Se han publicado resultados de un nuevo estudio en el que se evalúa el nivel de adherencia y el conocimiento de habilidades en el autocuidado en pacientes con tratamiento biológico para su enfermedad reumática. En este estudio se incluyen personas con Artritis Reumatoide principalmente, pero también se cuenta con la participación de pacientes con espondiloartritis, y artritis psoriásica.
En este estudio, el nivel de conocimiento sobre el automanejo del tratamiento biológico no se asoció con el nivel de adherencia. Los factores asociados a un alto nivel de conocimiento sobre el automanejo de la terapia biológica fueron el género femenino, la edad joven y el nivel educativo.
Los resultados de este estudio enfatizan la importancia de facilitar, mejorar e implementar programas educativos y una evaluación periódica de la adherencia al tratamiento por parte del equipo de reumatología.