A pesar de que las investigaciones se han multiplicado en las últimas décadas, ésta es la conclusión de un estudio de revisión publicado recientemente en la revista Frontiers in Neurology. Serían necesarios más estudios con foco en la Esclerosis Múltiple (EM) de la mujer, en particular respecto a aspectos como la menopausia, hormonas sexuales y diagnóstico precoz de cáncer.
Las investigaciones centradas en salud de la mujer, un ámbito de reciente desarrollo
Históricamente, la investigación sobre los problemas de salud de la mujer ha sido escasa. Más recientemente, se ha producido un cambio sustancial, con un creciente apoyo de las instituciones gubernamentales y no gubernamentales a la investigación sobre la salud de la mujer, acompañado de cambios estructurales en la organización y revisiones de las políticas sanitarias. El resultado ha sido el desarrollo de una investigación sobre la salud de la mujer, que está empezando a llenar el vacío anterior. Un ámbito en el que la investigación sobre la salud de la mujer reviste especial importancia es el de la gestión de las enfermedades crónicas.
La importante relación de la EM con la mujer
Al igual que otras enfermedades crónicas autoinmunes, la EM afecta principalmente a las mujeres. Las mujeres con esclerosis múltiple deben enfrentarse a retos relacionados con la gestión de la reproducción, el embarazo y la menopausia al tiempo que controlan su enfermedad. Por ejemplo, durante el embarazo se producen múltiples cambios fisiológicos, como la hipercoagulabilidad, la resistencia a la insulina, la inmunotolerancia a la unidad fetoplacentaria y el aumento del volumen plasmático. La adaptación a estos cambios puede ser más difícil en el contexto de una enfermedad crónica. Además, han surgido numerosas terapias modificadoras de la enfermedad para el tratamiento de la EM, pero la mayoría no se recomienda su uso durante el embarazo. Por lo tanto, las mujeres con EM deben equilibrar el tratamiento de su enfermedad con la salud del feto. Aunque la investigación en torno a la experiencia y el tratamiento de los problemas de salud de las mujeres con EM ha aumentado con el tiempo, las mujeres que viven con EM, los médicos y los investigadores reconocen que siguen existiendo lagunas de conocimiento.
Los autores de la revisión, son un grupo de investigadores que en su mayoría trabajan en EE.UU., Canadá y Europa, han intentado resumir la investigación existente sobre la salud de la mujer en la EM y destacar las áreas en las que es necesario aprender más.
Los científicos evaluaron un total de 353 estudios, publicados entre 1983 y 2020. La mayoría de los estudios eran relativamente recientes; el equipo señaló que «el número de estudios relativos a la salud de las mujeres ha aumentado exponencialmente con el tiempo».
De 10 estudios centrados en la mujer con EM en 2004 a 45 en el año 2020
En particular, según apuntan los autores, la cobertura de las cuestiones de salud de la mujer en la EM no aumentó notablemente hasta alrededor del cambio de milenio, y señalaron que en 2004, por primera vez, el número de estudios relacionados con las cuestiones de salud de la mujer en la EM llegó a 10. En 2020, se realizaron 45 estudios sobre cuestiones de salud de la mujer en la EM en un solo año.
El número de participantes en los estudios osciló entre dos y casi 100.000, con una mediana de 130. La mayoría de los estudios no informaron de la composición racial de los participantes. Aproximadamente tres cuartas partes de los estudios (78%) se centraron exclusivamente en mujeres con EM. Unos pocos se centraban en niños nacidos de padres con EM o incluían otras enfermedades, y el resto incluía a hombres o identidades de género no binarias con EM.
La mayoría de los estudios se llevaron a cabo en Europa o Norteamérica, y la mayoría se centró en la EM remitente recurrente. Los investigadores destacaron la necesidad de abordar la salud de las mujeres en personas con EM progresiva, así como la necesidad de contar con poblaciones más diversas en los estudios.
El embarazo, principal aspecto estudiado
Entre los cientos de estudios, los investigadores identificaron 509 temas individuales contemplados, señalando que algunos abordaban múltiples temas. Más de un tercio (37,2%) estaban relacionados con el embarazo: temas como las recidivas durante el embarazo, las complicaciones relacionadas con el embarazo y las decisiones sobre el tratamiento durante el embarazo. Otro 14,4% de los temas estaban relacionados con los resultados fetales o neonatales, que, según los investigadores, están estrechamente relacionados con el tema del embarazo. El tercer tema más comúnmente abordado, por alrededor del 10% de los estudios, fue la disfunción sexual. Otros aspectos relevantes en salud de la mujer, como la menopausia, el control de la natalidad, la reproducción asistida, la detección del cáncer y la identidad de género, recibieron poca atención, a juicio de los autores.
Que una gran parte de los estudios se centre en el embarazo no resulta sorprendente, dada la importancia que tiene el embarazo en la vida de muchas mujeres y el impacto de la EM en el embarazo y viceversa. No obstante, los autores observaron que siguen existiendo grandes lagunas de conocimiento sobre la EM y el embarazo; en particular, se destaca la falta de pruebas sobre la seguridad y la eficacia de los tratamientos de la EM cuando se utilizan durante el embarazo, ya que la mayoría de los ensayos clínicos excluyen a las mujeres embarazadas y lactantes.
«La exclusión de las mujeres embarazadas y lactantes de los ensayos clínicos, si bien es habitual en situaciones en las que existe una gran preocupación por el daño al feto en desarrollo, sigue limitando el tipo de pruebas y el momento de la información disponible para los médicos y las personas con EM en relación con el embarazo y la lactancia».
Poca investigación sobre la menopausia, a pesar de que afecta proporcionalmente a más mujeres
En comparación con el embarazo, los investigadores señalan que la menopausia ha recibido sorprendentemente poca atención. En esta revisión, sólo 10 estudios tocaron este amplio tema, a pesar de que la menopausia será experimentada por la gran mayoría de las mujeres con EM en algún momento de sus vidas. «Sigue existiendo la oportunidad de profundizar en la comprensión de las interacciones de la EM y la menopausia para ayudar a orientar a las mujeres con EM y proporcionar conocimientos adicionales sobre las influencias hormonales en la EM en general», escribe el equipo.
La revisión también destaca la necesidad de investigar más sobre la anticoncepción y la reproducción asistida en pacientes con EM, así como el riesgo de cáncer de mama.
Más allá de estos temas de salud, el equipo añadió que «hay otras cuestiones relevantes para las mujeres que viven con EM que no tuvimos en cuenta en nuestra revisión, como la violencia doméstica, especialmente en el contexto de las mujeres con deficiencias físicas o cognitivas.»