Un nuevo estudio evalúa el impacto de la presencia de factores de riesgo cardiovascular tradicionales antes del diagnóstico de Artritis Reumatoide sobre el riesgo de aparición de enfermedades cardiovasculares posteriormente.
La Artritis Reumatoide (AR) es una enfermedad sistémica inflamatoria crónica progresiva que se caracteriza por destrucción articular e incapacidad funcional. Estudios previos han calculado que el riesgo por muerte cardiovascular aumenta hasta en un 60% en pacientes con Artritis Reumatoide. Por otro lado, se han sugerido como factores de riesgo cardiovascular tradicionales al tabaquismo, la hipertensión o tensión arterial alta, la obesidad o IMC elevado, la diabetes y la carga inflamatoria. Sin embargo, y hasta donde sabemos no se ha analizado la asociación de factores de riesgo cardiovascular ya presentes antes del diagnóstico de Artritis Reumatoide y su relación con la aparición de enfermedad cardiovascular después de inicio de la AR.
Se han publicado los resultados de un nuevo estudio, realizado con más de 500 personas diagnosticadas de Artritis Reumatoide y de los que se conocía la información previa y posterior al diagnóstico de esta enfermedad sobre los factores de riesgo y de su enfermedad cardiovascular y esta información se ha comparado con un grupo de control (más de 1.500 participantes) sin Artritis Reumatoide.
En este estudio se demuestra que los factores de riesgo cardiovascular conocidos que estaban presentes antes del inicio de los síntomas de la Artritis Reumatoide se asociaron con enfermedad cardiovascular futura. Además, una combinación de mayor número de factores de riesgo presentes antes de la aparición de la AR se asoció con mayor riesgo de enfermedad cardiovascular futura. Es decir, tener dos factores de riesgo cardiovascular antes del diagnóstico de Artritis Reumatoide se asoció a mayor riesgo de enfermedad cardiovascular en comparación con tener uno o ninguno.
Los investigadores de este nuevo estudio concluyen que la presencia de factores de riesgo cardiovascular antes del inicio de los síntomas de la Artritis Reumatoide se asocia con mayor riesgo de enfermedad cardiovascular después del inicio/diagnóstico de la Artritis Reumatoide.
Estos resultados nos destacan la importancia de una evaluación temprana del riesgo cardiovascular identificando los factores de riesgo tradicionales en las personas tan pronto como se les diagnostica la Artritis Reumatoide. Además, es de vital importancia un control estricto del tratamiento en las primeras etapas de la AR para tratar de suprimir la actividad de la AR y la inflamación, con el fin de disminuir el riesgo cardiovascular de estos pacientes.
Otras noticias relacionadas que podrían interesarte