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El ejercicio acuático mejora la capacidad funcional, el equilibrio y la percepción de fatiga de mujeres con Esclerosis Múltiple leve, según los resultados de un estudio de reciente publicación.
Los síntomas de la Esclerosis Múltiple son muy variables, pueden ir desde la debilidad muscular, problemas de movilidad, trastornos del equilibrio, sensibilidad al calor, fatiga, parálisis, problemas de visión, entre otros y todos ellos contribuyen a una discapacidad prolongada y reducción de la calidad de vida.
Para frenar los efectos debilitantes de la Esclerosis Múltiple, se recomienda un entrenamiento o práctica de ejercicio de forma regular ya que esto ayuda a controlar y mejorar los síntomas.
El ejercicio beneficia a los pacientes con Esclerosis Múltiple de muchas maneras, incluyendo mejoras de habilidades físicas y cognitivas, mejora de forma gradual los síntomas depresivos y el agotamiento físico y reduce el riesgo a desarrollar otras dolencias significativas.
El ejercicio acuático proporciona mejoras en el tono muscular, en la capacidad aeróbica, en la flexibilidad y en los niveles de ansiedad. La flotabilidad natural y la viscosidad del agua pueden proporcionar potencialmente un entorno seguro y protector para que los pacientes con Esclerosis Múltiple realicen ejercicio haciéndoles sentir más fácil mover sus extremidades sin el temor de perder el equilibrio o caer. Los efectos de flotación del agua reducen la carga en las articulaciones, lo que puede tener un impacto positivo en los síntomas.
Según los resultado de un estudio realizado selectivamente en mujeres con Esclerosis Múltiple, el ejercicio acuático mejora significativamente la capacidad funcional, el equilibrio y la percepción de fatiga. Este estudio tiene como novedad porque se centra específicamente en un subgrupo poco representado en la investigación clínica, las mujeres.
En las personas con Esclerosis Múltiple, la pérdida del equilibrio puede ser un problema importante debido a la reducción de potencia y control de los movimientos. Por lo tanto, todas aquellas acciones que pueden ayudar a mejorar el equilibrio son fundamentales en para este grupo de pacientes.
Los investigadores de este estudio concluyen en que el entrenamiento regular con ejercicios acuáticos puede mejorar la capacidad funcional, el equilibrio y la percepción de fatiga en mujeres con Esclerosis Múltiple leve.
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ESCLEROSIS MULTIPLE
