Otros tratamientos de la Artritis Reumatoide
Tratamiento quirúrgico
En casos de Artritis Reumatoide grave, en aquellas personas en las que algunas de las articulaciones sufren un daño estructural severo, el médico puede proponer un reemplazo de las partes dañadas de la articulación por elementos sintéticos (metálicos o de plástico) llamados prótesis. Este reemplazo se llama artroplastia que puede ser parcial o total, es decir el intercambio de una o varias partes de la estructura articular o bien sustitución de la articulación entera por una prótesis completa.
Estas cirugías requieren rehabilitación después de la operación para un obtener el máximo beneficio. Pueden requerir de rehabilitación previa para fortalecer la musculatura de alrededor de la articulación afectada y así reforzar esta zona.
Los facultativos tienden a utilizar esta técnica como último recurso. Existe un gran arsenal farmacológico que se puede utilizar previamente.
La decisión dependerá de la valoración individual de cada paciente y se debe proceder a ella de mutuo acuerdo médico-paciente.
Otros tratamientos
A pesar de todo el arsenal farmacológico disponible, en ocasiones es necesario el apoyo de tratamientos complementarios para controlar la enfermedad, apoyo especial para evitar un deterioro definitivo de la articulación. El objetivo de utilizar otras terapias es que la persona afectada se sienta mejor y que disfrute de una mejor calidad de vida.
En ningún caso estas terapias complementarias podrán sustituir o reemplazar al tratamiento farmacológico, ya que es el que puede modificar la evolución de la enfermedad.
El tratamiento no farmacológico incluye un amplio abanico de posibilidades, desde medidas generales a terapias complementarias
Fisioterapia
La fisioterapia es una rama de la medicina que ayuda a mejorar el proceso evolutivo de la Artritis Reumatoide. La fisioterapia aporta técnicas físicas para mantener el funcionamiento de las articulaciones afectadas. Existen profesionales que te pueden ayudar aportando las diferentes variantes: Cinesiterapia (tratamiento con ejercicios)
Termoterapia (aplicación de calor en zona afectada), Crioterapia (aplicación de frío), Hidroterapia (empleo del agua con fin terapéutico), Electroestimulación (TENS o Estimulación Eléctrica Transcutánea), etc.
También es posible actuar localmente sobre las articulaciones que están especialmente inflamadas o que han perdido su funcionalidad, con material ortopédico especial. (plantillas para los pies, férulas de reposo para descanso de las extremidades, especialmente los dedos de las manos, collarines, etc)
Si todos estos métodos de tratamiento no dan resultado se puede hacer uso de la cirugía reparadora. Esto será decisión acordada entre el paciente y el especialista.
Existen diferentes técnicas para controlar el dolor que provoca la Artritis Reumatoide. Todas ellas con terapias complementarias al tratamiento que te ha propuesto tu médico. En cualquier caso, si decides utilizar alguna de ellas, es mejor que se lo comentes de antemano con tu médico, éste te ayudará y podrá orientarte hacia la opción más adecuada para ti.
Ejercicio
Una actividad física moderada y regular puede ayudarte a disminuir la fatiga, fortalecer los músculos y huesos y te ayudará a aumentar tu flexibilidad y tu energía. Todo esto te comportará una sensación de bienestar general.
En la sección de recursos y utilidades de In-pacient.es, encontrarás, entre otros, el apartado de “Ejercicio físico en artritis reumatoide” que te puede ayudar.
Masajes
Los masajes pueden ayudar aliviar el dolor y mejorar tanto la circulación como la función articular y disminuir el estrés y la ansiedad.
Acupuntura
Es la base de la medicina tradicional China. Consiste en insertar agujas muy finas en diferentes puntos del cuerpo con el objetivo de restaurar la salud y el equilibrio aportando bienestar en el paciente. Existe una evidencia clínica en estudios científicos limitada.
A pesar de que el tratamiento de la Artritis Reumatoide ha mejorado en las últimas décadas, gracias al uso de fármacos altamente eficaces, sabemos que entre 30-60% de los pacientes con enfermedades reumáticas usan, de alguna forma, la medicina complementaria.
Con fecha de mayo-junio de 2016 se publicó una revisión sobre la eficacia y seguridad de las terapias complementarias comúnmente utilizadas en reumatología. (Fernández-Llanio Comella N et al. Reumatol Clin. 2016 May-Jun;12(3):151-7. Have complementary therapies demonstrated effectiveness in rheumatoid arthritis? https://goo.gl/2z0pmY )
Tabla-resumen de la evidencia científica recogida hasta ahora, de los diferentes tratamientos utilizados comúnmente en Reumatología.
Método | Evidencia |
Dietas vegetariana y Dieta de eliminación | Efectos inciertos por datos insuficientes. |
Ayuno controlado+Dieta vegetariana (1 año) | Puede ayudar a personas con Artritis Reumatoide |
Dieta Mediterránea | La dieta mediterránea es segura y disminuye el riesgo cardiovascular ( la presión, el azúcar, la grasa en sangre) algo frecuente en personas con Artritis Reumatoide. Disminuye el dolor, la rigidez y la percepción de enfermedad por el paciente. |
Aceite de Pescado | Existe evidencia de beneficios en su uso complementario del aceite de pescado (omega-3) en la Artritis Reumatoide. Precaución en las personas que toman warfarina (anticoagulante) |
Aceite de Oliva Virgen | Existe evidencia de beneficios en enfermedades inflamatorias como la Artritis Reumatoide. |
Vitamina D | Efecto positivo sobre la actividad de la enfermedad y sobre el sistema inmune (o de defensa) previene de la ostopenia/osteoporosis. No se han reportado reacciones adversas en relación con el uso de Vitamina D |
Probióticos | Mejora en la percepción de la enfermedad y en la calidad de vida. Escasa evidencia en seres humanos. |
Plantas medicinales | Algunos productos de origen vegetal han demostrado efectos beneficiosos. Pero, son casos los estudios de calidad científica. Estos productos no están exentos de efectos secundarios. |
Ejercicio Físico | Se recomienda ejercicio físico en personas con Artriti Reumatoide. No se ha asociado con efectos nocivos sobre la actividad de la enfermedad. Se recomienda ejercicio físico de bajo impacto para evitar lesiones. |
Yoga | Tratamiento complementario factible y seguro. No se han reportados efectos secundarios sobre la practica de yoga en personas con Artritis Reumatoide |
Taichí | Puede beneficiar a personas con Artritis Reumatoide. Evidencia limitada. No se han observado efectos secundarios ni aumento de los síntomas con la práctica de Taichí en personas con AR. |
Meditación | Posibles mejoras en el bienestar psicológico |
Acupuntura | Pruebas contradictorias sobre la eficacia en personas con AR. Existe evidencia positiva en el tratamiento del dolor. |
Homeopatía | Pruebas disponible muy limitadas. No se han observado efectos secundarios. |
La ACR (Colegio Americano de Reumatología) apoya una evaluación científica rigurosa de todas las modalidades que mejoren el tratamiento de las enfermedades reumáticas, pero reconoce que, por las características de ciertas modalidades o tipo de técnicas, se hace difícil o imposible realizar estudios científicos rigurosos. En tal caso, y en ausencia de datos científicos de calidad, la ACR aconseja a los pacientes precaución en el uso de tratamientos no probados.