La enfermedad de Parkinson es uno de los trastornos neurodegenerativos más frecuentes a nivel mundial. Actualmente no existe ninguna cura disponible para esta enfermedad, por lo tanto el tratamiento se centra en aliviar los síntomas y ralentizar su progresión.
Los síntomas más característicos de la enfermedad de Parkinson son los síntomas motores como lentitud de movimiento, temblor en reposo, rigidez, inestabilidad postural, etc. que a día de hoy se reconocen como cruciales para el diagnóstico de esta enfermedad. Sin embargo, esta enfermedad también presenta síntomas no motores como la depresión, las alteraciones del sueño, el deterioro cognitivo, estreñimiento, etc. que pueden presentarse décadas antes del diagnóstico de Parkinson. Por lo tanto un diagnóstico precoz de la enfermedad de Parkinson es, a día de hoy, un reto importante ya que además los síntomas pueden ser comunes a otros trastornos.
Actualmente el diagnóstico se basa en las características clínicas, pero sería muy interesante disponer de biomarcadores específicos que nos ayude a un diagnostico precoz. Los biomarcadores o marcadores biológicos son sustancias cuya medida se utiliza como indicador de la existencia de una enfermedad, de su evolución o bien de la eficacia de un tratamiento. Recientemente se ha logrado avances en la búsqueda de posibles biomarcadores de la enfermedad de Parkinson que podrían contribuir a mejorar las opciones de tratamiento.
La saliva se considera un fluido corporal accesible y cuyo análisis y toma de la muestra es un método poco invasivo, pueden recogerse varias muestras al día y no se requiere de habilidades especiales ni es una técnica peligrosa para el paciente o el personal sanitario.
Una nueva publicación nos muestra los resultados de una revisión sistemática de la literatura científica publicada respecto a este tema y con el objetivo de determinar qué tan fiables pueden ser los biomarcadores salivales para el diagnóstico de la enfermedad de Parkinson.
Los investigadores de esta nueva revisión sistemática y meta-análisis concluyen que algunos biomarcadores potenciales, especialmente la alfa-sinucleína, podría verse significativamente alterados en la saliva de personas con Parkinson. Por lo tanto, se puede considerar el análisis de varios biomarcadores relevantes para su utilidad en el diagnóstico temprano de enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, se requiere de mayor investigación para confirmar estos resultados.
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